domingo, enero 31, 2010

Marito Valdovinos: ¡en el oeste ya te habrían balaceado y te lo dije!

TECHI.
Techi, Chani, Flo, Pat, Noel, Jesu, Pili, Cata, Cam, Dan, Bir…

Esa era mi chica, Peggy Sue, como cantaba Buddy Holly. Venía malito el Tarot, pero da lo mismo, Leonor no de Aquitania, sino del barrio San Diego; Aldonza Lorenzo del colegio de monjas, el Santa Rosa, tú que pedías que en los años futuros te lo pasaran en cruz para que no fuera pecado, ahora que llegaron y pasaron los  años venideros y no quedó títere con cabeza y ninguna, salvo tú, pudo ser soberana de ningún reino sobre el mar, allí están tus alucinados papeles, y todas se hundieron en las brumas de la locura y parieron sus hijos en hospitales públicos, nunca reinas del tablero de ajedrez, del que sepa Moya quién mueve las piezas, sino temporeras, obreras, costureras, profesoras y bailarinas de quintas de recreo, te aviso y te prevengo que esperaré tu funeral, no un jueves, en París y con aguacero, sino en el Parque del Recuerdo de Santiago. Voy a caminar por la Avenida de la Paz con un tocacintas y un casette de Albinoni y me sentaré en tu tumba a escuchar el Adaggio. Pondré sobre tu lápida la carta del ahorcado, con los pies hacia abajo.
Tú  sabes, Peggy Sue.
Enero 09.

lunes, enero 25, 2010

Una canción para entibiar el alma

Valparaíso es un carnaval, mientras tanto yo...




Y si hablamos de felicidad: yo olvidé el significado de esa palabra. Si hablamos de tristeza, la tristeza soy yo. Yo soy un dolor inmenso que camina por las calles esperando su turno en esta gran sala de enfermos terminales que es la vida.

viernes, enero 22, 2010

Estoy muerta y soy feliz


A Gregorio Angelcos

Fue en invierno.
Fue tu amor
mi piel desnuda,
un bosque de eucaliptos
el embrujo de las tardes,
el viento, el sol profundo.

Tú leías cuentos en las noches
para mí
yo tejía una bufanda en las mañanas
para ti.

La comida brotaba de tus manos
yo bebía de tus besos
y el mar rugía de tanto invierno
frente a la cabaña y el cobijo.

Allí quedamos vagando
adultos fantasmas
buscando la plenitud
que se escurría
entre las manos polvorientas.

Fuimos los anulares libres
Dos nombres sorprendidos.


lunes, enero 18, 2010

Orfandad presunta


Pedazos de mí
se desgañitan
en la rueda
gigante de la fortuna
o del infortunio
que ya es lo mismo
o casi igual.

Nacida del pozo profundo
de la tristeza,
una suerte de soledad
que nace
o no nace
porque es infinita
o es eterna.

Sin padres
ni hermanos
ni abuelos
ni amigos,
en estas horas largas
como cuerdas de acero
en mi garganta,
sólo tu amor es cobijo.

Entonces recapacito
y veo que el sol aún brilla
en los espasmos de una tarde
que se muere.

martes, enero 12, 2010

Elegía a doña Juana la loca


Princesa enamorada sin ser correspondida.
Clavel rojo en un valle profundo y desolado.
La tumba que te guarda rezuma tu tristeza
a través de los ojos que ha abierto sobre el mármol.


Eras una paloma con alma gigantesca
cuyo nido fue sangre del suelo castellano,
derramaste tu fuego sobre un cáliz de nieve
y al querer alentarlo tus alas se troncharon.



Soñabas que tu amor fuera como el infante
que te sigue sumiso recogiendo tu manto.
Y en vez de flores, versos y collares de perlas,
te dio la Muerte rosas marchitas en un ramo.

Tenías en el pecho la formidable aurora
de Isabel de Segura. Melibea. Tu canto,
como alondra que mira quebrarse el horizonte,
se torna de repente monótono y amargo.


Y tu grito estremece los cimientos de Burgos.
Y oprime la salmodia del coro cartujano.
Y choca con los ecos de las lentas campanas
perdiéndose en la sombra tembloroso y rasgado.


Tenías la pasión que da el cielo de España.
La pasión del puñal, de la ojera y el llanto.
¡Oh princesa divina de crepúsculo rojo,
con la rueca de hierro y de acero lo hilado!


Nunca tuviste el nido, ni el madrigal doliente,
ni el laúd juglaresco que solloza lejano.
Tu juglar fue un mancebo con escamas de plata
y un eco de trompeta su acento enamorado.


Y, sin embargo, estabas para el amor formada,
hecha para el suspiro, el mimo y el desmayo,
para llorar tristeza sobre el pecho querido
deshojando una rosa de olor entre los labios.


Para mirar la luna bordada sobre el río
y sentir la nostalgia que en sí lleva el rebaño
y mirar los eternos jardines de la sombra,
¡oh princesa morena que duermes bajo el mármol!


¿Tienes los ojos negros abiertos a la luz?
O se enredan serpientes a tus senos exhaustos...
¿Dónde fueron tus besos lanzados a los vientos?
¿Dónde fue la tristeza de tu amor desgraciado?

 
En el cofre de plomo, dentro de tu esqueleto,
tendrás el corazón partido en mil pedazos.
Y Granada te guarda como santa reliquia,
¡oh princesa morena que duermes bajo el mármol!


Eloisa y Julieta fueron dos margaritas,
pero tú fuiste un rojo clavel ensangrentado
que vino de la tierra dorada de Castilla

a dormir entre nieve y ciprerales castos.


Granada era tu lecho de muerte, Doña Juana,
los cipreses, tus cirios; la sierra, tu retablo.
Un retablo de nieve que mitigue tus ansias,
¡con el agua que pasa junto a ti! ¡La del Dauro!


Granada era tu lecho de muerte, Doña Juana,
la de las torres viejas y del jardín callado,
la de la yedra muerta sobre los muros rojos,

la de la niebla azul y el arrayán romántico.


Princesa enamorada y mal correspondida.
Clavel rojo en un valle profundo y desolado.
La tumba que te guarda rezuma tu tristeza
a través de los ojos que ha abierto sobre el mármol.
Federico García Lorca

lunes, enero 04, 2010

¡Feliz Cumpleaños, Hijo Mío!


Hijo querido, pienso en qué puede decirle una madre a su hijo que cumple 35 años, sin recordar ese domingo caliente del 5 de enero de 1975 cuando ambos estuvimos a punto  de morir. Pero le ganamos por puntos a la vida y aquí estamos. Tú un poeta extraordinario y yo, una mamá enamorada de su creación mayor.
Feliz cumpleaños, hijo querido de mi corazón, pequeño Oaki...

sábado, enero 02, 2010

Mi papá en objetos queridos

¿Dónde están?



Los objetos delatan que existieron

Las fotografías comprueban que existió el globo terráqueo desaparecido misteriosamente la misma tarde oscura tras la muerte de mi padre.
Pero acá está y ojalá que empiecen a aparecen en otras fotografías esos objetos de mi padre que andan perdidos en busca de su dueño junto a los 5.000 ejemplares de su biblioteca que él fue juntando libro a libro durante 70 años. Empezó a los 8 y terminó a los 78.
Papá, sigue dando pistas para que tus objetos perdidos aparezcan.
Te quiero mucho

viernes, enero 01, 2010

Feliz Año 2010 (Desde Viña con amor)

Felicidades a tod@s
Creo que es el primer Año Nuevo en que mi papá no sufre de angustia ni dolor de fin. El cielo es eterno y la biblioteca del Paraíso se llama Alfonso Calderón. Están todos los libros que se han escrito y los que no alcanzó a leer. Seguramente está pidiendo que no lo molesten porque tiene mucho por hacer aún y que así y todo, ni siquiera la propia eternidad le alcanzará para leerlo y escribirlo todo.
Viva Alfonso Calderón y Feliz 2010.

Después de la misa en Viña cuando mi abuela Roma Squadritto Napoli habría cumplido 100 años